domingo, 30 de enero de 2011

Estornudos de pasión.


Largos viajes en tren. Repetitivos, monótonos y aburridos viajes. Horas que te devuelven el amor hacia la lectura, hacia la reflexión. Cierras los ojos, oyes el traquetear de las vías, el murmullo incesante. Apoyas la cabeza en el respaldo, duermes cinco minutos, tal vez diez, pero te despierta la voz que anuncia una nueva parada, una nueva oportunidad para ser alguien, para huir de una vida mediocre, para intentar ser feliz.


Canción.

1 comentario:

José Madrid dijo...

Intenta ser feliz en cada 10 minutos de lectura, de música o de paisajes que puedes disfrutar en tu tren rutinario, UN ABRAZO!!